El consumo fotovoltaico en naves industriales puede ser perfectamente factible si se cumplen unos determinados requisitos en las cubiertas de las edificaciones, que han de ofrecer una superficie que tenga la extensión suficiente para resultar apta como campo solar, contar con la morfología adecuada y estar realizadas en materiales compatibles con el montaje de este tipo de sistemas.
Cuando se reúnen todas las condiciones necesarias, las instalaciones de consumo fotovoltaico emergen como una solución muy interesante para las construcciones industriales, máxime en una coyuntura como la actual con precios de suministro eléctrico al alza, que repercuten especialmente en empresas que hacen un uso electrointensivo, como por ejemplo las dedicadas a actividades producción, o las que tienen que conservar y almacenar productos a temperaturas muy bajas.
Ventajas del consumo fotovoltaico en naves industriales
Una instalación fotovoltaica industrial permite aprovechar la cubierta de la nave o planta para captar la energía solar, y utilizarla como complemento o sustitutivo del suministro procedente de la red eléctrica, e incluso en ciertos casos pueden llegar a generarse excedentes susceptibles de ser vendidos.
Además, una instalación de esta naturaleza supone una ganancia de autosuficiencia energética, al permitir consumir la energía que se precisa en el mismo momento que se genera, sin tener que depender del suministro general, o bien reduciendo al mínimo el abastecimiento del mismo.
Por no hablar de todos los beneficios medioambientales que tiene el consumo fotovoltaico máxime cuando se trata de naves industriales, que inevitablemente tienen unas necesidades de suministro más altas que otro tipo de construcciones.
La energía solar es limpia, renovable e inagotable, y además en determinadas zonas de España como las del Levante contamos con un promedio de días soleados que se aproxima a los 300.
A todo lo referido, se suma que los plazos de amortización de la inversión en los sistemas de consumo fotovoltaico se reducen apreciablemente en coyunturas alcistas en el precio del suministro, de modo que prácticamente pueden autofinanciarse con los ahorros obtenidos mes a mes.
Igualmente, también habría que valorar el estímulo que suponen las ayudas y subvenciones que se están concediendo con cargos a los fondos europeos para la dotación de sistemas fotovoltaicos, tanto en industrias como en hogares.
Por último, cabe destacar no deja de tener su repercusión en la imagen corporativa alinearse con los valores medioambientales que predominan actualmente en nuestra sociedad, algo que ejemplifica a la perfección la publicidad que Tesla dio al hecho de que la cubierta de su nueva gigafactoría estuviese compuesta de paneles solares.
Cubiertas de naves industriales ideales para instalaciones de consumo fotovoltaico
Las cubiertas industriales que resultan más adecuada para montar sistemas fotovoltaicos son las realizadas en materiales como la chapa metálica, que habitualmente están elaboradas en acero galvanizado y grecadas. Aquí, la fijación de los paneles resulta muy sencilla, y también se asegura la robustez, resistencia y durabilidad de la instalación.
Otro tanto ocurre con las cubiertas de panel sándwich, que garantizan un anclaje perfecto, ya se trate de una estructura coplanar o inclinada. Si bien, es cierto que las cubiertas planas simplifican el montaje al ser transitables, lo que evita la ralentización operativa inherente a la adopción de las imprescindibles medidas de seguridad.
El consumo fotovoltaico como medida activa para la eficiencia energética
Aunque el autoconsumo fotovoltaico sea una solución que aporte mucho para la eficiencia energética de una nave industrial, solo estamos hablando de una de las medidas activas que se pueden poner en liza para conseguir este objetivo, que asimismo requeriría la adopción de otras medidas de tipo pasivo.
En Anovel Ingeniería planteamos todos nuestros proyectos de construcción de naves industriales bajo los principios de la arquitectura sostenible, lo que implica que podemos dotar a las construcciones de cubiertas que reúnan todos los requisitos para instalar paneles solares. Pero también, que desplegamos todo el arsenal de medidas activas y pasivas orientadas a la consecución de la máxima eficiencia energética.
Así, el propio diseño de nuestras naves se plantea bajo la búsqueda del mayor ahorro en el consumo de energía, un objetivo que puede hacernos optar por la aplicación de soluciones constructivas como las fachadas ventiladas, o por el uso de materiales para los cerramientos como el panel sándwich que destaca por sus propiedades aislantes, que alcanzan además a la vertiente acústica, y se conjugan también con unas estupendas posibilidades estéticas.
Igualmente, dotamos a las cubiertas sistemas de aislamiento térmico que reducen al máximo las pérdidas energéticas, en una zona que según todos los cálculos sería la responsable de más de 2/3 partes de las mismas.
Asimismo, estudiamos en profundidad los comportamientos energéticos que tendrían los distintos materiales en la nueva nave industrial. Para ello, disponemos de recursos de vanguardia como el software BIM, que nos permite calcular a la perfección este aspecto, al igual que otras tecnologías nos facilitan diseñar espacios interiores aptos para el alojamiento de soluciones de iluminación y climatización que sean energéticamente eficientes.
Con todo, aquí no acaba nuestro despliegue de medidas para buscar la eficiencia energética, ya que diseñamos interiores de naves industriales concebidos para hacer más fáciles las tareas de limpieza y mantenimiento, que repercuten en el consumo de energía, al precisar de iluminación, alimentación eléctrica para máquinas o herramientas, etc.
Si necesitas una nueva nave para tu empresa totalmente adaptada a los requisitos de vuestra actividad y que sea energéticamente eficiente no dudes en contar con nosotros. ¡Contacta con Anovel Ingeniería y te explicaremos más en detalle todo lo que podemos ofrecer!
